TDAH, Trauma y Trastorno por Estrés Postraumático (TEPT)

La conexión entre el TDAH y el trauma es bidireccional. El TDAH aumenta el riesgo de vivir eventos traumáticos, y el trauma puede empeorar o simular síntomas de TDAH. Es crucial diferenciar la base biológica de la respuesta ambiental.

La Definición: Confusión de Síntomas

El TEPT y el TDAH comparten síntomas clave, lo que a menudo lleva a un diagnóstico erróneo:

  • Inatención / Disociación: En el TDAH, la inatención es crónica. En el TEPT, la falta de foco es un mecanismo de defensa (disociación) para huir del recuerdo.
  • Hiperactividad / Hipervigilancia: La hiperactividad TDAH es impulsividad motora. La hiperactividad del TEPT es hipervigilancia (un estado constante de alerta de «lucha o huida») ante el peligro.
  • Disregulación Emocional: El TDAH causa DER por falta de freno cerebral. El TEPT causa disregulación porque el sistema de alarma (amígdala) está dañado y se dispara con facilidad.

La Ciencia/El Porqué: Estrés Tóxico

El trauma, especialmente en la infancia (ACEs – Adverse Childhood Experiences), genera estrés tóxico. El cortisol elevado y el estrés crónico dañan el desarrollo de la Corteza Prefrontal (CPF), que es la misma área que ya es débil en el TDAH.

  • Doble Golpe: El individuo con TDAH ya tiene una CPF vulnerable genéticamente, y el trauma adquirido la debilita aún más.
  • Mecanismo: El trauma prioriza el sistema límbico (supervivencia) sobre la CPF (pensamiento lógico), exacerbando la impulsividad y la dificultad para planificar.
  • El Riesgo: Sin diagnóstico dual, el tratamiento (medicina o terapia) puede fallar, ya que solo se está tratando la mitad del problema.

Estrategias Prácticas: Abordaje Terapéutico

Si existe trauma, los profesionales suelen priorizar la estabilización del trauma antes de centrarse en las habilidades ejecutivas.

  1. Validación Dual: Reconocer que la impulsividad tiene una causa neurobiológica (TDAH) y una causa ambiental (Trauma).
  2. Terapias Específicas: Explorar terapias como TCC enfocada en el Trauma (TCC-TF) o EMDR para reprocesar los recuerdos, reduciendo la hipervigilancia.
  3. Técnicas de Grounding: Usar anclajes sensoriales (ej. tacto, olores, peso) para sacar a la persona del estado de alerta y traerla al presente.
  4. Psicoeducación: Entender que la hipervigilancia no es un «síntoma TDAH», sino una respuesta de supervivencia del cuerpo.


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